La llamada coalición liderada por Estados Unidos contra el EIIL (Daesh, en árabe) no ha atacado intencionalmente ciertos de los principales centros de mando de la banda takfirí en Irak y Siria, según un informe.
No hemos atacado sus centros en Raqa. Todas las carreteras entre Siria e Irak siguen aún intactas y los camiones pueden circular libremente
Funcionarios estadounidenses de inteligencia han identificado siete edificios en la ciudad siria de Raqa, ubicada a 550 kilómetros al norte de Damasco (capital), como “las sedes principales” del EIIL, indica un informe del diario norteamericano The New York Times publicado este martes.
Aun así, asegura el rotativo, los edificios han permanecido “intactos” durante la campaña aérea de la controvertida coalición, que comenzó en septiembre de 2014.
“No teníamos intención de entrar en conflicto con ellos”, dijo un piloto de un avión estadounidense de ataque A-10, quien habló en condición de anonimato en un reciente correo electrónico.
“No hemos atacado sus centros en Raqa. Todas las carreteras entre Siria e Irak siguen aún intactas y los camiones pueden circular libremente”, agrega el piloto a continuación.
El diario también señala que los terroristas bien armados del EIIL “desfilaron” la semana pasada por las calles de Ramadi, capital de la provincia occidental iraquí de Al-Anbar, sin ser objeto de ataque alguno por parte de Estados Unidos.
Este claro rechazo a abatir a los terroristas se conoce pese a que, de acuerdo con la publicación, “los aviones de guerra estadounidenses y de sus aliados están equipados con el arsenal aéreo más preciso”.
Algunos altos mandos militares iraquíes sostienen que Washington está permitiendo a los terroristas del EIIL moverse libremente por el campo de batalla con demasiada frecuencia.
“La alianza internacional no está proporcionando un respaldo suficiente en comparación con las capacidades del EIIL sobre el terreno en Al-Anbar”, critica Mohamad al-Dulaimi, un oficial iraquí en la provincia de Al-Anbar.
“Los ataques aéreos estadounidenses en Al-Anbar no ayudan a que nuestras fuerzas de seguridad sean capaces de resistir y confrontar los ataques del EIIL”, ha afirmado, para luego subrayar: “hemos perdido gran parte del territorio en Al-Anbar debido a la ineficacia de los ataques aéreos de la coalición liderada por Estados Unidos”.
Pero el rotativo destaca que los oficiales norteamericanos tratan de justificar esta inacción alegando que les preocupa que los ataques contra el EIIL puedan causar daños colaterales.
De todas formas, los ataques de la coalición ya han causado bajas civiles. De acuerdo con el opositor Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH), al menos 52 civiles sirios, entre ellos siete niños, han perdido la vida como consecuencia de los bombardeos de la coalición.
Desde septiembre de 2014, Washington, junto a algunos de sus aliados regionales, está realizando ataques contra el EIIL dentro de Siria sin una autorización por parte de Damasco o la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Los ataques en Siria comenzaron después de que la coalición liderada por Estados Unidos comenzara en agosto de 2014 sus ataques en suelo iraquí, con el supuesto fin de acabar con el EIIL.
Muchos de los países que conforman la coalición, como Turquía, Arabia Saudí y Catar, apoyan a los hombres armados que luchan contra el Gobierno sirio.
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